- El banco central de Venezuela es propietario de Bitcoin (BTC) y Ether (ETH) para mantener reservas financieras y seguir siendo solvente.
- El objetivo es luchar contra la hiperinflación y las sanciones de Occidente.
Venezuela lanzó al mercado su propia moneda nacional digital, el «Petro», en abril del año pasado. Se dice que el Petro está respaldado por las reservas de petróleo del país y, por lo tanto, debería ofrecer un valor estable en la gravemente debilitada economía venezolana. Venezuela tiene la tercera reserva de petróleo más grande del mundo, por lo que la suposición de que el Petro está completamente respaldado por petróleo puede ser cierta. Sin embargo, hasta ahora esto no ha sido confirmado por ninguna auditoría independiente.
Nicolás Maduros, Presidente de Venezuela, se enfrenta desde hace algún tiempo a fuertes sanciones por parte de Occidente, que tienen un fuerte impacto en la moneda nacional (bolívar venezolano). En mayo de 2019, la tasa de inflación alcanzó un máximo histórico de 815.194 por ciento. La propia criptomoneda del país fue creada para poner fin a las sanciones y para tratar de combatir la hiperinflación persistente y lograr una reactivación de la economía.
En los Estados Unidos de América, así como en otros países políticamente alineados con los Estados Unidos, el uso del Petro estaba estrictamente prohibido. Según un reciente informe de Bloomberg, el Banco Central de Venezuela mantiene posiciones en Bitcoin y Ether con el fin de disponer de una reserva financiera, en caso de nuevas sanciones.
¿Bitcoin y Ether como coberturas de crisis?
Bloomberg tiene información de cuatro personas que están familiarizadas con el asunto. Por lo tanto, el banco central venezolano está llevando a cabo pruebas internas e investigaciones para determinar si se les permite mantener criptomonedas en su tesorería. Estos esfuerzos se basan en instrucciones de la estatal Petroleos de Venezuela SA (PDVSA, la mayor petrolera de América Latina), que envía Bitcoin y Ethereum al banco central y hace pagar a los proveedores de la petrolera por la autoridad monetaria.
Actualmente, los empleados del banco central están investigando si es posible acreditar criptomonedas contra las reservas internacionales y así tener fondos líquidos disponibles. Las reservas del país se encuentran en su nivel más bajo de los últimos tres años, algo menos de 7.900 millones de dólares. Las sanciones han debilitado gravemente al país y han llevado la inflación a niveles sin precedentes. Por lo tanto, Venezuela está buscando formas de salir de la crisis. Las criptomonedas juegan un papel central porque no están controladas por ninguna institución central en el mundo.
Los Estados pueden promulgar leyes para prohibir Bitcoin y similares, pero no pueden desactivar Bitcoin. Hasta ahora no se ha aclarado de manera concluyente cómo PDVSA entró en posesión de Bitcoin y otras criptomonedas.
Los bancos internacionales más grandes son reacios actualmente a hacer negocios con la empresa sancionada PDVSA. Más recientemente, la compañía recibió un pago de 700 millones de dólares en yuanes chinos a medida que se hace cada vez más difícil encontrar compradores dispuestos para el petróleo.
¿Puede Bitcoin resolver la crisis?
Bitcoin es visto como una reserva potencial de valor por muchos países de todo el mundo que se enfrentan a una situación similar. Por lo tanto, no es de extrañar que Venezuela esté tratando de encontrar formas de salir de la crisis mediante el uso de nuevas tecnologías como el blockchain y Bitcoin. El gobierno venezolano incluso está considerando desmantelar el sistema SWIFT y cambiar a un sistema de pago internacional operado por Rusia.
El precio de Bitcoin está mostrando actualmente una importante tendencia a la baja, cayendo un -4,12% hasta los 7.982,33 USD en las últimas 24 horas.
Queda por ver si Bitcoin puede salvar a la debilitada Venezuela o ayudar a mejorar la situación.