- La ASIC publica un proyecto de directrices que aclaran las aplicaciones de activos digitales en virtud de la Ley de Sociedades de 2001.
- El nuevo marco de la ASIC pretende mejorar el cumplimiento y la protección del consumidor en los servicios de activos digitales.
La Comisión Australiana de Valores e Inversiones (ASIC) ha publicado un proyecto de recomendaciones destinadas a aclarar cómo se aplica la Ley de Sociedades de 2001 a los activos digitales.
Al adecuar estas nuevas tecnologías a la legislación vigente, este impulso normativo pretende resolver la creciente complejidad de los servicios financieros relacionados con los activos digitales. Con ello, la ASIC quiere simplificar los procedimientos de cumplimiento para que la seguridad del consumidor siga siendo una prioridad absoluta.
📢 JUST IN: AUSTRALIA’S FINANCIAL WATCHDOG, ASIC, SEEKS FEEDBACK ON NEW DIGITAL ASSET GUIDANCE; CHANGES AIM TO CLARIFY CORPORATIONS ACT 2001 APPLICATIONS TO DIGITAL ASSETS
— BSCN Headlines (@BSCNheadlines) December 4, 2024
La ASIC fomenta la concesión de licencias y la participación de las partes interesadas en los servicios de activos digitales
Las políticas sugeridas aconsejan a las empresas que prestan servicios financieros relacionados con activos digitales que soliciten una Licencia Australiana de Servicios Financieros (AFSL). La ASIC ofrece un periodo de gracia en el que las empresas que realicen el procedimiento de solicitud estarán libres de acciones legales, lo que facilitará el cambio.
Sin embargo, el regulador espera que las empresas que decidan no solicitarla expliquen su decisión, demostrando así su compromiso de mantener un estrecho control. Además, las normas sugieren que algunas empresas presenten prospectos auditados que muestren un cambio hacia el manejo de las criptobolsas como mercados financieros tradicionales.
Respecto a estas ideas, el sector de los activos digitales de Australia ha respondido de forma algo diferente. Mientras que algunos líderes empresariales están preocupados por las posibles amplias consecuencias, otros han reconocido la importancia de comunicarse con las autoridades.
Por ejemplo, los estrictos criterios de concesión de licencias y la expectativa de divulgaciones auditadas pueden causar la consolidación de las empresas, en cuyo caso los actores más pequeños podrían tener dificultades para satisfacer las normas más estrictas.
Aun así, la ASIC está decidida a mejorar el marco basándose en los comentarios de los interesados, y la versión final de las normas está prevista para mediados de 2025. Las respuestas públicas tienen de plazo hasta el 28 de febrero de 2024.
Este esfuerzo legislativo forma parte de un plan más amplio de Australia para lograr una combinación entre innovación y protección del consumidor. Fomentar la confianza y promover el desarrollo responsable mediante un marco jurídico claro para los activos digitales es crucial a medida que estos siguen ganando impulso.
Las actividades de la ASIC también reflejan una tendencia mundial, ya que los países se debaten sobre la mejor manera de controlar el cambiante espacio de las criptomonedas.
Por otra parte, CNF señaló anteriormente que XRP fue citado en un estudio gubernamental de la Oficina de Impuestos de Australia. Este reconocimiento hace hincapié en la creciente aceptación de XRP, lo que indica un futuro positivo para la criptomoneda.